martes, 17 de julio de 2012

Soy una desconfiada compulsiva por Alejandra Stamateas

Génesis 25:29 "Un día, cuando Jacob estaba preparando un guiso, Esaú llegó agotado del campo y le dijo: Dame de comer de ese guiso rojizo, porque estoy muy cansado. Véndeme primero tus derechos de tu hijo mayor, le respondió Jacob. Me estoy muriendo de hambre, contesto Esaú, así que ¿de qué me sirven los derechos de primogénito? véndeme entonces los derechos bajo juramento, insistió Jacob. Esaú se lo juró, y fue así como le vendió a Jacob sus derechos de primogénito. Jacob, por su parte, le dio a Esaú pan y guiso de lentejas. Luego de comer y beber, Esaú se levantó y se fue. De esta manera menospreció sus derechos de hijo mayor."
¿Cuantos desconfían de alguien? A veces nos cuesta lanzarnos, tirarnos, viene un hombre acá y le preguntamos ¿tenés casa?, ¿tenés coche? nos dice todo que si, pero nos da como una cosa cuando nos dice todo que si, que la suegra está lejos, que gana muy bien, que tiene dos o tres casas, como que nos agarra algo de no confiar demasiado.
Todos en algún momento somos un poco desconfiados, pero hay personas que son desconfiadas compulsivas, que te dicen, mirá, yo creo en Dios hasta por ahí nomás y no creo en nada más, porque me han hecho tantas en la vida, y empiezan los problemas por la desconfianza.
¿Qué es la confianza? la confianza es una emoción. Cuando yo tengo confianza, yo me relaciono con otra persona sin ningún tipo de miedo y sin ningún tipo de expectativa, como que, me relaciono con el otro y no tengo miedo de lo que me pueda hacer, no tengo ninguna expectativa y tampoco le exijo nada, yo me relaciono porque me gusta relacionarme con el otro; eso es relacionarse desde la confianza, pero las personas que se relacionan desde la desconfianza, se relacionan con el otro a través del miedo, teniéndoles miedo, exigiéndoles cosas y teniendo grandes expectativas. Por ejemplo: Yo quiero que esa persona me dé, me haga sentir que yo le tengo miedo, tengo miedo a que no me cumpla, tengo miedo de que esa pareja me sea infiel, tengo miedo de que mis hijos no puedan, o sea, cuando la relación de desconfianza se centra en el miedo, en la expectativa y exigencia. Cuando yo tengo miedo de relacionarme con el otro, porque creo que el otro me puede fallar, aparece la desconfianza y empezamos a desconfiar de gente conocida y de gente no conocida. Por ejemplo, empezamos a desconfiar del vecino que vive en la otra cuadra, empezamos a desconfiar de nuestros hijos, empezamos a desconfiar de nuestra pareja, empezamos a desconfiar de nuestra suegra, empezamos a desconfiar de cuando alguien nos dice algo, cuando a una mujer le dicen ¡que linda que estás! dicen ¿por qué me lo estará diciendo?, ¿que querrá conseguir de mi? o cuando te dicen, que inteligente que sos, ¡Uy! debo ser una tonta para que esta me diga: qué inteligente, porque dije una pavada. Y vivimos desconfiando de los otros y de lo que los otros nos dicen a nosotros, y a veces la desconfianza te lleva a decir: ahora me traicionaron, no confío más en nadie. Como si fuera un escudo de protección.
Hay muchas personas que dicen: yo no confío en nadie, y sienten que eso es un orgullo para ellas, decir, yo no confío en nadie, a mi nadie me va a traicionar, se ponen como un escudo de protección y dicen: ahora estoy libre, no me va a pasar nada.
Te quiero hacer una pregunta ¿a vos te gusta esa manera de relacionarte con los demás?
¿Te gusta relacionarte bajo la desconfianza?, ¿Te da los resultados que querés siempre?
¿Relacionarte bajo la desconfianza te da los resultados que estás buscando y esperando?
¿Es verdad que desconfiar de todo el mundo te mantiene a salvo?
Estar alerta todo el tiempo y desconfiar de todo el mundo ¿te mantiene a salvo para que nadie más te lastime o te hiera?
La gran pregunta que vos te tenés que hacer es esta, bien, tengo una conducta que es la desconfianza que siento que me protege de que otros me hieran, pero ¿me sirve esta conducta que estoy teniendo? y eso hacetela con cualquier conducta que tengas en la vida ¿me está sirviendo?, yo me puse este escudo protector, pero ¿me sirve para lograr las metas y objetivos? yo que estoy sola en la vida al desconfiar de todo el mundo ¿me ha ayudado, o me sigue dejando en el mismo estado y me sigue haciendo una mujer infeliz? Yo, que me divorcié, el no confiar en otro hombre más, ¿me ayuda a buscar una nueva pareja o en realidad me deja en un estado de tristeza?, ¿me da libertad o me da alegría esta conducta?, ¿me sirve o no me sirve? porque si hay una conducta o una actitud que tenemos en la vida que no nos sirve, tenemos que cambiarla, porque por ahí, por tener un parámetro de comportamiento, te estás perdiendo un montón de bendiciones. Si tengo que cambiar algo para mi bien lo voy a cambiar. Si tenés que cambiar algo para tu bien, cámbialo. No seas porfiada.
Seguramente sos una persona desconfiada y usas ese escudo de protección porque alguien te traicionó ¿cuántos fueron traicionados en algún momento de la vida? todos.
¿Por qué alguien nos traicionó?, ¿por qué unas personas son más fácilmente traicionadas que otras? Generalmente nos traicionan por nuestros espacios vacíos. Todos tenemos aéreas en donde sentimos carencias, nos falta algo, todos nos sentimos necesitados en algún área de nuestra vida, sentimos que para esa área de nuestra vida falta algo, y tenemos el concepto, especialmente las mujeres, de que alguien va a venir a nuestra vida y nos va a cubrir esa carencia, especialmente a las mujeres que nos han enseñado que, ¿para qué vas a trabajar o estudiar, si va a venir un hombre, te vas a casar y te va a mantener? eso era antes, ya no se enseña mas eso, pero antes te decían ¿para qué vas a estudiar? lo importante es que te cases, tener hijos, siempre tenía que venir alguien de afuera a suplir esa carencia que teníamos, entonces las mujeres empezamos a establecer relaciones de necesidad.
¿Que son las relaciones de necesidad? es ver a cada persona que se nos cruza por la vida como una persona capaz de suplirnos una necesidad, vos conocés a alguien, le decís y bueno, éste me puede dar trabajo, conocés a otra persona y decís, éste le puede dar trabajo a mi hijo, conocés a otra persona decís, tiene plata, me puede pagar los impuestos, conocés a otra y decís, bueno, ésta me puede pagar un pasaje para que yo viaje, que es el sueño de toda la vida, o sea, empezamos a mirar a la gente, a ver si esa persona puede suplirme esa necesidad que en este momento tengo. Y ahí aparecen dos conductas muy comunes, especialmente en las mujeres, que ayudan a que el otro nos termine manipulando, esas dos conductas se llaman: compresión instantánea y el síndrome romántico.
¿Qué es la comprensión instantánea? Es, yo miré a esa persona y de entrada yo sentí algo, a mi me parece una buena persona y te entregás totalmente, confiás totalmente. O el síndrome romántico, es tan lindo, un hombre así no puede mentir, si está viniendo a la iglesia, si viene es un buen hombre, porque vos pensás, un veinticinco de mayo podría estar haciendo cualquier cosa, pero vino a la iglesia, ese hombre la tiene clarísima, ¿cuántas pensaron así?, el hombre es espiritual, porque a vos enseguida te agarra ese síndrome romántico, es tan encantador que ya saqué la conclusión, no necesito saber nada, por eso hay tantas mujeres estafadas y manipuladas, son mujeres que no averiguan datos. ¿Cómo le voy a preguntar?, dicen, yo no puedo preguntarle, cuantas fueron al médico y no le peguntaste nada de lo que tenias, me daba no se qué preguntarle, decís, iba a parecer una tonta, como le voy a preguntar a ese hombre si ama a Dios, si vino a la iglesia re-ama a Dios, no preguntamos, no averiguamos, sacamos conclusiones falsas, porque tenemos datos falsos, incompletos o incorrectos. O mujeres que por este síndrome romántico empiezan a dar datos sobre ella, datos personales y privados, se lo cuentan al primero que sintieron el latido en el corazón, y decís, mirá al único que se lo digo, las llaves de mi casa están debajo de la maceta, agárrala y entrá cuando quieras, y recién lo conoció y le da datos de la cuenta bancaria, le dice cuantos hijos tiene, donde trabaja, a que hora sale de la casa y todos esos datos que no se los debería dar, pero el síndrome romántico hace que la mujer no quiera saber nada mas de la historia, a muchos hombres también les pasa, ven a una mujer, les gusta, dicen, yo no averiguo nada, y van de narices a la manipulación, porque no averiguan. Tenés que averiguar, porque si no averiguás vas a ser una persona vulnerable a los demás y la necesidad te ciega, cada vez que vos te movés por necesidad, la necesidad te va a cegar, la necesidad te ciega a las habilidades que tenés vos, para suplirte vos esa necesidad y agrandás las habilidades del otro, y decís, el otro a mi me puede suplir la necesidad que tengo, eso es cuando estás cegada, no ves a nadie más y lo único que querés es que aparezca esa persona que te va a sacar del problema, del conflicto, de la preocupación, de la deuda, decís, es esa persona, y te cegaste, y ahí no podés pensar que tenés dada por Dios, la capacidad para salir de ese problema, y decís es el otro el que me va a ayudar a resolver mi problema o mi necesidad o conflicto. A veces el gran problema que tenemos en la manipulación, es que las necesidades que tenemos nos asustan, me asustan. Cuando viene una necesidad en la vida, una necesidad económica, una necesidad emocional, una necesidad física, esa necesidad aparece en nuestra vida y nos agarra miedo, nos asusta ¿cómo lo voy sobrellevar?, ¿cómo lo voy a hacer?, ¿cómo voy a salir de ésta?, ¿a ver si me quedo toda la vida en esta misma situación? y nos asustamos, y queremos huir de esa necesidad buscando a alguien que pueda resolvernos, desde afuera, lo que nos está pasando, por eso te voy a enseñar el primer principio, para poder confiar en la gente con tranquilidad. ¿Cuántos quieren confiar con tranquilidad?
Primer principio: no me tiene que asustar lo que estoy viviendo.
No te tiene que asustar lo que estás viviendo, ¿estás viviendo una enfermedad? no te asustes, ¿estás viviendo un problema económico? no te asustes, ¿estás viviendo un problema emocional? no te asustes, ¿tenés un problema con tus hijos? no te asustes, ¿tenés un problema en tu trabajo?, no te asustes, ¿tenés un problema en tu casa? no te asustes, no me voy a asustar con lo que estoy viviendo. Ese es el primer principio, porque si vos no te asustás, vos mantenés un rumbo en la vida, pero si te asustás sos presa de los manipuladores. Un día yo leí la historia de Esaú, tenía hambre, y tuvo hambre y se asustó, tenía una necesidad y se asustó y dijo: me voy a morir de hambre y se asustó. Llegó a la casa y vio al hermano que estaba haciendo un guiso de lentejas y dijo, me muero de hambre, si no me das las lentejas me voy a morir, porque tuvo una necesidad y se asustó. No me tengo que asustar con lo que me está pasando.
¿Qué te está pasando hoy? ¿Cuál es esa preocupación, esa necesidad, que te está dictando al oído que te vas a morir?, ¿Qué te está dictando al oído?, ¿que de ésta no salís?, ¿que no sabés como vas a quedar después? ¿Cuál es esa necesidad que estas rogando para que venga alguien y te la supla? porque si vos te asustás va a venir un manipulador en tu vida, y no vas a poder confiar en la gente, pero si vos no te asustás, vas a seguir buscando la bendición que Dios ya tiene preparada para tu vida.
No me asusto, no me asusto. ¿Saben que hay personas que tienen cara de asustadas? Decís, me voy a quedar soltera, me voy a quedar para vestir santos, no tengo plata, no voy a poder pagar esa deuda, tengo una enfermedad, mi marido se fue con otra, mirá la cara de susto que tenés. No me asusto. No te asustes, pases por lo que pases, no te asustes, y entonces dice que llega Esaú y le dice, me estoy muriendo de hambre, me voy a morir, por favor dame de comer, ¿cuántos sintieron hambre? y Jacob aprovechando, ¿Jacob era un manipulador? o Jacob aprovechó la situación como la aprovecharía cualquiera, porque tal vez, a veces decimos, el otro me hizo, el otro fue el que me engañó, el otro fue el que se aprovechó de mi, pero será que nosotros estábamos tan asustados y el otro aprovechó la situación, y Jacob le dijo, véndeme la primogenitura, que era la doble bendición que tenía el hijo mayor, se le daba doble herencia, no recibía una, recibía dos, por ser el hijo más grande. Reclamala, si el papá tenía cuatro casas y tenía tres hijos había dos que iban para vos, para el hijo mayor, porque para el hijo mayor era la doble bendición, y entonces el hijo primogénito tenía una gran bendición y una gran responsabilidad frente a la primogenitura, no cualquiera podía tener la doble bendición de un padre, y él dijo, a mi no me importa esto, y desperdició su doble herencia, desperdició su doble bendición para saciar su necesidad, a mi no me importa lo que va a venir después, a mi me importa llenarme la panza, ¿cuántas veces te pasó eso? que por llenarte la panza ahora, te perdiste de la doble bendición, cuantas veces por decir, la respuesta tiene que venir de esa persona, no me importa quién sea, no me importa si es un tránsfuga, si la plata es buena o mala, yo la necesito ahora, y por hacer esa concesión te perdiste de la doble bendición que Dios tenía para tu vida. Una mujer me decía: Alejandra, conocí a un hombre que me dijo: tengo un súper-trabajo en un hotel, gano mucho dinero, y las amigas como no tenían la necesidad de ella, vieron que había algo raro, porque los de alrededor se dan cuenta de lo que te pasa, la única que no se da cuenta es la que tiene una necesidad a suplir, ese hombre no me gusta, me parece que miente, las amigas lo siguieron hasta el trabajo y él, lo que hacía, era con el pañuelo hacer que los autos estacionaran, y vivía de lo que le daban, que no está nada mal eso, el problema es la mentira, no el trabajo, pero ¿por qué no fue y le dijo a ella: mirá, yo vivo de esto? En vez de hacerle toda la historia, todo un verso, y cuando las amigas le dijeron, la llevaron, vení, porque no nos vas a creer, y la llevaron a donde estaba este hombre y vieron como el hombre hacía entrar a los autos, y ella dijo, a mi que me importa, pero ¿no te duele que te haya mentido?, porque si te mintió en esta, te va a mentir en cualquiera, porque si fue tan caradura de decirte que trabajaba en los mejores lugares, y te iba a comprar los mejores perfumes, y te iba a llevar a los mejores hoteles por el puesto que tenía, ¿no será que frente a la necesidad estás soltando la doble bendición que Dios tiene para tu vida por un plato de lentejas?, ¿no será que hasta ahora te traicionaron en la vida porque estabas necesitada, estabas carente de algo, y entonces agarraste a la primer persona que se te cruzó por delante a ver si te podía suplir la necesidad y vendiste cualquier cosa con tal que esa persona te supliera esa necesidad?
Te voy a amar para toda la vida, dejaste a toda tu familia, te fuiste atrás de ese hombre y ese hombre te terminó engañando, porque necesitabas ser querida, amada, necesitabas ser acariciada, y dejaste todo y dejaste la posibilidad de tener una doble bendición en tu vida por irte detrás de un plato de lentejas. En este tiempo ¿estás yendo detrás de algún plato de lentejas?
¿Te olvidaste que Dios tiene algo más grande para tu vida? ¿Te olvidaste que todos nosotros somos lo primogénitos de Dios? ¿Te olvidaste que para cada uno de nosotros hay una doble porción de su Espíritu?
Tu miedo, tu susto, siempre te va a hacer perder la doble bendición. Cuando alguien te vea con cara de susto, esa persona siempre va a estar ahí preparada para comprarte lo bueno que vos tenés, siempre va a haber un Jacob esperando, cuando le muestres cara de susto, no tengo, ¿qué voy a hacer? me quedé sola, esto es un desastre, ¿cómo voy a mantener a mis hijos?, ¿cómo voy a hacer con mi casa? y mi trabajo, ahora me echaron, ¿que voy a hacer? siempre va a haber un Jacob escuchando tu lamento, y viendo tu cara de susto para tomar la doble bendición que Dios ya dijo que te pertenecía a vos. No esperes a que venga Jacob, reclamá tus derechos de doble bendición en Cristo Jesús. No cedas tu derecho, no cedo mi doble porción, no cedas, este hombre vendió barato algo caro ¿estas vendiendo barato algo caro?, ¿estás vendiendo barato algo que tiene mucho valor?, ¿te estás vendiendo barato vos que tenés el gran valor de Dios, que tenés una herencia doble sobre tu vida, por un plato de lentejas, por un poco de nada? tal vez estés esperando un poco de nada, tal vez estés esperando, y bueno, me voy a vivir en la pensión, me da cinco pesos por día, por lo menos me da cinco pesos, ¿estás vendiendo a precio barato algo que es muy caro? tu vida no tiene precio querida mujer, tu vida es valiosísima, y vos tenés que aprender a esperar la doble bendición que viene desde el cielo dentro de poco, para tu vida y para los tuyos. Nuestra vida es valiosísima, somos los primogénitos, somos los que tenemos la doble herencia, Dios tiene más para nuestra vida, no vendas nada, no tengas susto en medio de la necesidad porque Dios va a suplir todas tus necesidades conforme a sus riquezas en gloria.
En Hebreos 12 a Esaú lo llama profano, dice que Esaú era profano, ¿saben que significa profano? sin Dios. Cuando vos vas a otra persona con tu necesidad y con cara de susto y vendés lo mas valioso por nada, vos estás yendo al otro sin Dios, estas yendo como un profano, sin Dios, necesito de vos, estoy solo en este mundo, no tengo a nadie que me supla esa necesidad, necesito de vos, estoy sin Dios, y el otro te ve la cara de susto y dice, esta viene a mi sin Dios, y a veces actuamos de esa manera, sin Dios, cuando vienen los problemas actuamos sin Dios, como si no tuviéramos Dios. Fíjense que interesante, Jacob que le había comprado la primogenitura, dice que le fue muy mal después, porque tuvo un suegro que lo engañó, lo manipuló, y él decía: me quiso engañar, Dios siempre actúa en mi favor, me quisieron hacer mal, pero Dios actuó en mi favor, éste que le había comprado la primogenitura amaba más a Dios que el otro, que no le había dado importancia a la bendición. Esa que vos decís, ¿por qué no tranza esa? no tranza porque está con Dios, por eso no tranza, pero para qué sufrir tanto y aguantar tanto, ¿sabés por qué lo hace? porque está con Dios, por eso no tranza, por eso no vende lo que tiene por poco, porque se sabe valorar en Dios. Dice que hizo un pacto Jacob con Dios, tenía que ir a enfrentarse con el hermano, que lo quería matar porque le había comprado la primogenitura, ahí se dio cuenta, que locura que hice, voy a matar a mi hermano, le fue mas fácil echarle la culpa a otro que decir: yo estuve mal, y dice Jacob: mi hermano me quiere matar, entonces se encontró con Dios, hizo un pacto con Dios, le dijo: si Dios fuere conmigo y me guardare en este viaje, me diere pan para comer y vestido para vestir y yo volviere en paz, Jehová será mi Dios. Dice que fue, vio al hermano, arregló todo con su hermano y volvió en paz, porque él no era un sin Dios, él era uno que había pactado con Dios. Vos no sos un hombre o una mujer sin Dios, vos hiciste pacto a través de Jesucristo, para ir, para volver, para que Dios te vista, para que Dios te dé de comer, para que Dios te sane, para que todas tus necesidades estén suplidas en él, porque sos un varón y una mujer con Dios. No me importa quien esté ahí porque yo voy con Dios, mi necesidad la recibió Dios, el otro está ahí, puede suplirme o no puede suplirme, no me importa, porque mi necesidad está en Dios y yo confío en Dios, porque yo estoy con Dios, no estoy sin Dios, no tengo cara de asustada, sé que Dios va a hacer lo más maravilloso para mi vida, porque él ya me lo prometió, porque yo estoy con Dios. Estoy con Dios, vos y yo tenemos Dios, no somos parias, no estamos solos en este mundo, no estamos librados a cualquier cosa, vos y yo tenemos Dios, pero a veces no nos damos cuenta y caminamos sin Dios.
Cuando murió mi papá, yo estuve muchos años confundida, es simple y sencillo, pero a mi se me hizo una confusión mental impresionante, la gente me preguntaba ¿tenés papá?, y yo no sabía que decirle, yo no sabía si decirle: no tengo papá o tenía papá, no sabía como contestar esa pregunta sencilla, porque yo decía, si digo: tengo papá, mi papá está muerto, pero igual es mi papá, pero si yo digo, tenía, es que murió, pero él es mi papá por siempre, entonces se me había hecho una confusión, diecinueve años tenía, y no sabía como contestar esa pregunta, porque yo no tenía en claro que mi papá se había muerto, por eso no sabía si estaba o no estaba, porque no había aceptado que se había muerto, no sabía como responder y a veces vienen las necesidades y te preguntás esto, ¿tengo papá o no tengo?, ¿tengo Dios o no?, ¿me va a ayudar o no me va ayudar?, ¿qué hago?, ¿tranzo con esto o no tranzo?, ¿qué hago? y te hacés esa pregunta, ¿tengo Dios o no tengo Dios? yo quiero decirte que tenés Dios y tu Dios está permanentemente bendiciéndote, mirando tu vida para ayudarte a dar el último paso. Leí un correo de una mujer que me dice, estoy cuidando a mi marido enfermo con un cáncer en la cabeza, es un médico, toda su vida ayudó a otra gente y ahora él, en cinco meses se está muriendo, y yo le hago una pregunta, me decía: ¿Dios no se ocupa de mí? ¿Dios está ocupado en otras cosas? yo le dije: Dios está ocupado en vos porque te está fortaleciendo para que no bajes los brazos, para que decretes fe, y tu marido en poco tiempo se levante de esa cama y tenga la sanidad, Dios está ocupado en fortalecer tu fe para que salgas adelante, porque tenemos Dios.
Dice Romanos, ustedes no recibieron un espíritu que los esclavice al miedo, yo no recibí un espíritu que me esclavice al miedo, sacate la cara de susto porque hoy sos libre no tenés que atarte al miedo y dice: el Espíritu que los adopta como hijos y les permite clamar Abba Padre, ¿sabes que quiere decir Abba Padre? papito, hay un Espíritu que no te esclaviza al miedo sino un Espíritu que en medio de la necesidad te dice yo tengo papá, santo.
Cuando vayas delante de alguien que te quiera pagar menos, te quiera dar menos, que te quiera hacer sentir miserable, vos tenés que decir, yo tengo papá, yo sí tengo papá, tenés que hablarle a Dios diciéndole pa, yo estoy todo el día diciéndole pa, ni siquiera le digo papá le digo pa, dale pa, acordate pa, mirá que necesito esto pa, mirá que hoy vamos a tal lugar pa, podes decir pa, ¿cuantas pueden decir pa? Pa, trata así a Dios es papá, vos vas caminando por la vida y tenés papá, caminas por la vida y Dios es tu papá y podes entrar delante del trono de pa y pedir todo lo que necesites, por eso, si vas de esta manera, cuando vayas delante de la gente nadie va a poder manipularte, porque vas a tener tus necesidades de antemano resueltas por papito.
Abba Padre papito querido. Yo tengo Dios, tengo pa, si tenés algún problema tengo pa. Es lindo que frente a las necesidades a la gente recuerdes siempre tengo papá, recordá eso siempre, yo tengo Dios, yo no voy sin Dios voy con Dios a todos lados, yo no sé el otro pero yo si tengo Dios y mi Dios me provee, me bendice me da doble bendición. Gloria a Dios.
El diablo te quiso poner un sello de naciste para perder, pero Dios te pone el sello de nacido para ganar en todas las aéreas de tu vida, sácate la cara de susto, que no te corresponde a vos porque Dios te ha dado la cara de confianza en un Dios Todopoderoso.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Puedes dejarnos tu opinión si deseas aportar algo o si sientes que este mensaje te ha servido